China continúa tomando medidas enérgicas contra las empresas de tecnología locales para envidia de los competidores. Ni Apple, Microsoft o Google han podido hacer lo que ahora ha puesto en práctica con éxito el Partido Comunista Chino. Las acciones de las empresas chinas están cayendo a su ritmo más rápido registrado. El siguiente paso en la agenda de China es prohibir que las empresas de TI con grandes cantidades de datos de usuarios coticen en el extranjero. En otras palabras, estas empresas ya no podrán vender sus acciones fuera de China. Antes de la nueva regla, la Comisión Reguladora de Valores de China (CSRC) emitió una advertencia a varias empresas e inversores. El anhelo insaciable del gobierno por el control total ha ido al límite. Entrar en divisas siempre ha sido un desafío para las empresas chinas. Tienen que crear una empresa offshore con un nombre similar fuera de China, lanzar una oferta pública inicial y luego transferir los fondos recibidos. Gigantes de TI como Alibaba, DiDi y Tencent utilizan el esquema denominado "accionista variable" debido al límite de las inversiones extranjeras en empresas chinas. Aparentemente, las empresas de tecnología ahora tendrán que idear nuevos esquemas para eludir las restricciones.
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