En Japón, no hay una opinión única sobre si el país podrá eliminar por completo nuestro gas natural y petróleo rusos. Las autoridades locales están tratando de prever todos los escenarios posibles y comprender la necesidad de tal decisión. Sin embargo, algunas empresas del país no comparten el optimismo del gobierno al respecto.
Takeshi Hashimoto, presidente de Mitsui Osk Lines Ltd., es uno de los que no cree en posibles alternativas al gas natural ruso. Hashimoto cree firmemente que Japón no puede prescindir de los productos básicos rusos en este momento. Dice que el gas natural, que Japón compra a un precio relativamente barato de Rusia bajo contratos a largo plazo, es necesario para satisfacer las necesidades básicas de electricidad del país.
Una de las razones por las que Japón no está dispuesto a cortar los suministros de GNL de Rusia se debe a los altos precios en el mercado al contado.
Tras la propuesta de Japón de limitar el precio del petróleo ruso, Dmitry Medvedev, vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, dijo que los precios del petróleo podrían subir más que el precio astronómico previsto de más de $300-$400 por barril.