Los gigantes chinos de la tecnología de la información están sufriendo ahora una severa represión iniciada por el gobierno de China. Estados Unidos empeora aún más la situación para las empresas que ya están asfixiadas. En particular, implementaron sus propias medidas contra las grandes empresas tecnológicas chinas.
Pekín sometió a una intensa presión a las mayores empresas privadas locales. Además, las contrapartes y los reguladores extranjeros están tratando de convertir su negocio en un completo desastre. Recientemente, el presidente de la Comisión de Bolsa y Valores, Gary Gensler, advirtió sobre una posible exclusión de las acciones chinas de las bolsas estadounidenses. El funcionario dijo que las empresas con sede en China deben cumplir con las nuevas reglas para auditar sus documentos financieros. En caso de que una empresa no cumpla con los nuevos estándares antes de 2024, será expulsada de las bolsas estadounidenses eliminando las acciones de la empresa. Las nuevas restricciones tienen como objetivo castigar a las empresas chinas que han utilizado las bolsas estadounidenses para recaudar dinero durante décadas. Gensler dijo que haría cumplir estrictamente las nuevas reglas y no permitiría retrasos en las inspecciones. Las empresas deberán proporcionar una divulgación completa y justa de las auditorías para los inversores. Para lograr esto, la SEC prestará mucha atención a la información sobre posibles riesgos regulatorios o políticos para las empresas chinas impuesta por el gobierno de China. El presidente de la SEC señaló que lo más probable es que las auditorías se realicen en 2022.